Cantabria, situada en el norte de España, es una provincia llena de contrastes, donde la belleza natural y la historia se entrelazan en cada rincón. Conocida por sus espectaculares paisajes de montañas, verdes valles y costas escarpadas, esta región ofrece una riqueza cultural y patrimonial que la convierte en un destino imperdible.
Los pueblos de Cantabria son reflejo de su historia, desde la época medieval hasta la modernidad, con calles empedradas, casas de piedra y una atmósfera que transporta a tiempos pasados. En cada uno de estos pueblos, podemos encontrar la esencia de Cantabria, marcada por la tranquilidad de sus parajes y la calidez de su gente.
En este artículo vas a conocer los 5 pueblos más bonitos de Cantabria que hemos visitado hasta el momento.
Los 5 pueblos más bonitos de Cantabria
Liérganes
Liérganes es uno de los pueblos más pintorescos y mejor conservados de Cantabria, y su encanto radica en su mezcla de historia, leyenda y naturaleza. Este pueblo es famoso por la leyenda del Hombre Pez, una historia que ha perdurado a lo largo de los siglos y que añade un toque de misterio al lugar. Pasear por sus calles es como adentrarse en un cuento, con sus casas señoriales de piedra, balcones de madera y tejados de pizarra que nos transportan a otra época.
Uno de los puntos más emblemáticos de Liérganes es su Puente Mayor, un puente de piedra que data del siglo XVI y que ofrece unas vistas espectaculares del río Miera y del entorno natural que rodea al pueblo. Otro lugar de interés es el Balneario de Liérganes, un complejo termal que ha sido un referente en la región desde el siglo XIX y que es perfecto para relajarse en un entorno tranquilo. Además, la Iglesia de San Pedro Ad Víncula, construida en el siglo XVII, es otro de los monumentos que no podemos dejar de visitar. Liérganes es un lugar ideal para disfrutar de la historia, la naturaleza y la tranquilidad en un entorno único.
Bárcena Mayor
Otro de los 5 pueblos más bonitos de Cantabria para nosotros es Bárcena Mayor, considerado uno de los pueblos más antiguos y mágicos de Cantabria, ubicado en pleno Parque Natural Saja-Besaya. Este pequeño pueblo, que ha sido declarado Conjunto Histórico-Artístico, conserva la arquitectura típica montañesa, con casas de piedra y madera, tejados de teja roja y balcones llenos de flores que le dan un encanto especial. Pasear por sus calles es como retroceder en el tiempo, y es fácil imaginar cómo era la vida en este pueblo en siglos pasados.
El entorno natural de Bárcena Mayor es simplemente espectacular, con bosques frondosos y ríos que rodean el pueblo, lo que lo convierte en un destino ideal para los amantes del senderismo y la naturaleza. Además, Bárcena Mayor es conocido por su rica gastronomía, especialmente por sus platos tradicionales como el cocido montañés, que podemos degustar en alguno de los restaurantes del pueblo. La Iglesia de Santa María, de origen románico, es otro de los lugares de interés que merece la pena visitar. Bárcena Mayor es, sin duda, uno de los pueblos más auténticos y bellos de Cantabria, donde podemos disfrutar de la naturaleza, la historia y la cultura en un entorno único.
Argüeso
Argüeso es un pequeño y encantador pueblo situado en la comarca de Campoo, conocido principalmente por su impresionante castillo medieval. El Castillo de Argüeso, que data del siglo XIII, es uno de los castillos mejor conservados de Cantabria y ofrece unas vistas espectaculares del valle y las montañas circundantes. Este castillo ha sido restaurado y convertido en un atractivo turístico que nos permite explorar su historia y disfrutar de su arquitectura. Pasear por las torres y murallas del castillo es una experiencia fascinante que nos transporta a la época medieval.
El entorno natural que rodea Argüeso es también digno de destacar, con rutas de senderismo que nos permiten disfrutar de la belleza de los paisajes cántabros. Uno de los recorridos más populares es la ruta que lleva al Nacedero del río Ebro, un lugar de gran belleza natural que es ideal para una escapada en pareja. Además, Argüeso es un lugar perfecto para disfrutar de la tranquilidad y la serenidad de la vida rural, lejos del bullicio de las grandes ciudades. Es un destino ideal para quienes buscan combinar historia, cultura y naturaleza en un entorno auténtico.
Potes
Potes, conocido como la capital de los Picos de Europa, es uno de los 5 pueblos más bonitos de Cantabria con más turistas. Situado en el corazón del Valle de Liébana, Potes es el punto de partida perfecto para explorar el impresionante Parque Nacional de los Picos de Europa. El casco antiguo de Potes es un laberinto de calles empedradas, casas de piedra con balcones de madera y puentes que cruzan el río Deva, creando un ambiente encantador y acogedor.
Uno de los puntos más destacados de Potes es la Torre del Infantado, una fortaleza medieval que domina el paisaje y ofrece unas vistas espectaculares del valle. La torre alberga un museo que nos permite conocer más sobre la historia de la región y sus tradiciones. Además, Potes es famoso por su rica gastronomía, especialmente por su orujo, un aguardiente tradicional que podemos degustar en alguna de las tabernas del pueblo.
También es un lugar ideal para disfrutar de la naturaleza, con numerosas rutas de senderismo que nos llevan a través de paisajes impresionantes. Potes es, sin duda, un destino imprescindible para los amantes de la naturaleza y la historia.
Santillana del Mar
Santillana del Mar es uno de los pueblos más conocidos y visitados de Cantabria, y no es para menos, ya que su casco histórico es una auténtica joya medieval. Conocida como la “villa de las tres mentiras” (ni es santa, ni llana, ni tiene mar), Santillana del Mar es un lugar que sorprende a cada paso. Sus calles empedradas, sus casas señoriales y sus edificios históricos nos transportan a la Edad Media, creando un ambiente único y encantador.
Uno de los principales puntos de interés de Santillana del Mar es la Colegiata de Santa Juliana, una impresionante iglesia románica que data del siglo XII y que es uno de los monumentos más importantes de Cantabria. Pasear por las calles de Santillana del Mar nos permite descubrir rincones llenos de historia y encanto, como la Plaza Mayor, rodeada de casas nobles y palacetes. Además, Santillana del Mar es el lugar perfecto para disfrutar de la cultura y la gastronomía cántabra, con numerosos restaurantes y tiendas de artesanía donde podemos degustar productos locales y llevarnos un recuerdo de nuestra visita. Santillana del Mar es, sin duda, un lugar imprescindible para cualquier viajero que visite Cantabria.
Y hasta aquí nuestro contenido donde te hemos hablado de los 5 pueblos más bonitos de Cantabria merecen mucho la pena visitar por lo menos una vez en la vida. Son pueblos para visitar solo pero también para disfrutar mucho de una escapada romántica en pareja.