Boltaña, situada en la comarca del Sobrarbe, en la provincia de Huesca, Aragón, es una joya escondida en el corazón del Pirineo aragonés. Este pueblo, con un notable patrimonio histórico que incluye su castillo del siglo X y la iglesia de San Pedro, es el reflejo de la rica historia y la belleza natural de la región.
Boltaña, con su impresionante entorno natural, ofrece un sinfín de oportunidades para los amantes de la aventura y aquellos que buscan tranquilidad en un paisaje de montaña. Este lugar no solo cautiva por su belleza y su tranquilidad, sino también por ser un punto de partida ideal para explorar los pintorescos pueblos de la provincia, cada uno con su encanto único, historia y tradiciones.
Si te apetece descubrir pueblos mágicos, en este contenido te vamos a informar de los pueblos bonitos cerca de Boltaña que no te debes perder.
Los Pueblos más bonitos de Boltaña
Aínsa
Aínsa, ubicado a solo 15 kilómetros de Boltaña, es un pueblo medieval perfectamente conservado que parece sacado de un cuento de hadas. Su casco antiguo, declarado Conjunto Histórico-Artístico, está dominado por el castillo de Aínsa y la iglesia parroquial de Santa María.
Las calles empedradas, plazas, y las vistas panorámicas del entorno montañoso, hacen de Aínsa un destino imperdible para aquellos que buscan sumergirse en la historia y la cultura del Pirineo aragonés.
Jaca
Jaca, situada a unos 80 kilómetros de Boltaña, es conocida como la «Perla del Pirineo» por su importante patrimonio cultural e histórico. La ciudad es famosa por su Ciudadela, un impresionante castillo del siglo XVI, y la catedral románica, una de las más antiguas de España.
Jaca es un centro cultural vibrante con museos, festivales y una animada vida nocturna, además de ser un punto de referencia para los deportes de invierno.
Aínsa y Jaca son dos pueblos bonitos cerca de Boltaña de obligada visita para los amantes de los castillos.
Fiscal
Situado a unos 20 kilómetros de Boltaña, Fiscal ofrece una puerta de entrada al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.
Aunque más conocido como punto de partida para aventuras en la naturaleza, el propio pueblo de Fiscal, con su puente románico y la iglesia de San Miguel, es un encantador lugar para explorar y disfrutar del ambiente rural aragonés.
Broto
Broto, a unos 30 kilómetros de Boltaña, es un pueblo encantador que sirve como otro acceso al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.
Además de su belleza natural, Broto destaca por su puente medieval y la iglesia de San Pedro, ofreciendo un entorno tranquilo para disfrutar de la arquitectura tradicional y la serenidad del Pirineo.
Si te gusta hacerte fotos en puentes miedevales, Fiscal y Broto son dos pueblos bonitos cerca de Boltaña a los que debes ir.
Bielsa
A aproximadamente 40 kilómetros de Boltaña, Bielsa se encuentra en la entrada sur del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.
Este pueblo no solo es famoso por su entorno natural espectacular, sino también por su arquitectura tradicional pirenaica y el Museo de Bielsa, que ofrece una visión profunda de la cultura y las tradiciones de la región.
Si quieres hacer senderismo y disfrutar de bosques verdes, Fiscal y Bielsa son dos pueblos bonitos cerca de Boltaña muy interesantes para ello.
Alquézar
A unos 50 kilómetros de Boltaña, Alquézar es un pueblo que se alza majestuoso sobre el cañón del río Vero. Conocido por sus estrechas calles medievales y el impresionante conjunto colegial de Santa María la Mayor, Alquézar es también el punto de partida ideal para aquellos interesados en practicar senderismo por las pasarelas del río Vero y explorar las pinturas rupestres de la zona.
Graus
Graus, a unos 60 kilómetros de Boltaña, es famoso por su plaza Mayor, una de las más bellas de Aragón, rodeada de edificios renacentistas y barrocos.
El pueblo también es conocido por su tradición en la elaboración de embutidos y por el santuario de la Virgen de la Peña, que ofrece vistas espectaculares de la región.
Adentrarse los pueblos bonitos cerca de Boltaña permite descubrir la riqueza cultural, histórica y natural de esta parte del Pirineo aragonés. Cada pueblo, con su patrimonio único y su entorno natural, ofrece una experiencia inolvidable que captura la esencia de Aragón, desde sus tradiciones ancestrales hasta su impresionante belleza paisajística.